Riflexionando

¡Igualito que el otro!
Vuelve Obama con el mismo discurso y la misma prepotencia que el anterior presidente a enjuiciar a Cuba por la situación de los Derechos Humanos. Esta claro que quien dirige un país, violador indiscutible de los más elementales derechos de todos los seres humanos del planeta, que asesina impunemente a hombres, mujeres y niños, que permite la tortura y mil barbaridades más, no puede compartir la política al respecto de Cuba, solidaria y humana con los más necesitados en cualquier lugar del mundo.
Intenta seguir engañando al mundo, tal como han hecho sus antecesores.

Quizás ahí esté la razón de sancionar a quien negocia con Cuba y no permitir que los norteamericanos viajen libremente a Cuba, pues se les caería la venda de los ojos y sabrían quien realmente viola los derechos de hombres y pueblos.
A continuación la digna respuesta de las autoridades cubanas a tanta mentira